Allí hemos realizado una visita guiada, apreciando el olivo centenario, de más de 500 años, y nos hemos introducido en el mundo del aceite, nos han explicado su proceso de elaboración y hemos visitado la bodega y la envasadora, donde nos han relatado el proceso de envasado del aceite. También hemos visitado otras instalaciones, para realizar un recorrido por la historia centenaria de la empresa, finalizando la visita con una exquisita cata.
Agradecemos a sus trabajadores por tan buena acogida, personificada en Alba, Nazaret y Sagrario.
La familia García de la Cruz ha plantado y cuidado sus olivos desde tiempos inmemoriales y se ha dedicado, desde 1872, a cuidar la calidad del zumo que de ellos se obtiene: el aceite de oliva virgen extra. Cinco generaciones de aceiteros mejorando la calidad de su aceite: desde Federico Serrano en 1872, hasta los actuales gerentes los hermanos Fernando y Eusebio García de la Cruz Pascual, la empresa ha ido creciendo pasando de ser un pequeño negocio familiar, a una de las empresas con mayor proyección y desarrollo exterior en el mundo del aceite.
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